La publicidad consiste en informar al público de los diferentes productos o servicios que ofrecen las empresas o las instituciones.
En la mayoría de los casos, la publicidad nos anima a adquirir un producto o un servicio con el objetivo de aumentar las ventas de una empresa.
Otras veces la publicidad también se utiliza para educar o informar sobre comportamientos beneficiosos para todos. Por ejemplo, los anuncios que nos recomiendan ahorrar energía.
La publicidad educativa la suelen realizar las administraciones públicas (gobiernos o ayuntamientos), las fundaciones o las organizaciones sin ánimo de lucro (ONG).
Para lograr que los consumidores conozcan y se interesen por un producto o un servicio, los publicitarios, que son los profesionales que crean la publicidad, utilizan diferentes técnicas.
Repetir muchas veces el mensaje publicitario a través de diversos medios.
Exagerar los beneficios o las ventajas que proporciona un producto o servicio concreto.
Asociar la imagen de un producto o una marca con un personaje famoso, con un héroe, con una determinada canción o con un sentimiento emotivo.
Ofrecer descuentos, regalos por determinadas compras o facilidades de pago.
La publicidad tiene un coste, que se añade al precio final del producto o servicio. Por ejemplo, la publicidad con famosos es muy costosa y las ventas deben compensar ese gasto.
Los principales elementos que intervienen en el mensaje publicitario que se transmite a través de la publicidad son: el emisor, el destinatario, el mensaje y el medio de difusión.
El emisor es la empresa o la institución que quiere dar a conocer el producto o el servicio que ofrece. Algunas empresas tienen un departamento de publicidad y otras contratan ese servicio a las agencias de publicidad.
Algunas empresas tienen un departamento de publicidad, que se encarga de elaborar y difundir los mensajes publicitarios.
Otras empresas contratan ese servicio a las agencias de publicidad, que son empresas especializadas en el diseño y la realización de la publicidad.
El destinatario es el conjunto de personas a las que va dirigido concretamente un producto o servicio. Por ejemplo, los anuncios de juguetes van dirigidos a los niños.
El mensaje es la información que se transmite: nombre del producto o servicio, marca, cualidades que tiene.
En el mensaje generalmente, se incluye un eslogan, que es una frase breve y fácil de recordar que resume las características del producto o servicio.
El medio de difusión es el canal por el que se transmite el mensaje publicitario. Los medios de difusión pueden ser: gráficos, auditivos, audiovisuales, Internet y publicidad exterior.